El ultimo minuto del ultimo día
del año 2007, dos sucesos muy aislados y de una magnitud muy diferente
marcarían el comienzo de una serie de sucesos cruciales para el destino del
universo y de la humanidad; uno, fue un accidente de un joven que buscaba
salvar la vida de su hermana, el otro, fue el vencimiento de un trato hecho
entre un ángel y la humanidad 120 años atrás. Ese fue el último día en que muchos
creyeron entender el concepto “Realidad”.
CAPITULO
1
“EL
CONTRATO VENCIDO”
La noche del 31 de Diciembre del 2007 en el centro exacto del
triangulo de las Bermudas, un yate se estaba acercando a una zona del mar
que brillaba en un tono rojo tan intenso
que la luz de la luna era casi imperceptible para todos aquellos que viajaban
en ese navío. Al mismo tiempo en una pequeña ciudad llamada San Cristóbal de
las Casas, un joven de 16 años llamado Gael se encuentra en una sala de
operaciones, al borde de la muerte tras haber sido atravesado por varillas de
construcción que habían caído sobre el, por culpa de un maldito borracho que
casi mata a su hermana al casi atropellarla y destruir una casa en construcción
con su camión fuera de control.
La operación y la perdida de sangre continuaban mermando la vida de
ese pobre chico y al mismo tiempo en ese mar con la luz roja, unas voces
siniestras provenientes de un capullo hecho con las plumas de alas de un ángel en
el fondo del mar, pronunciaba una y otra vez en cientos de idioma una frase que
significaba “Tu tiempo ha expirado Isbisael”; y justo cuando dio la media noche
el capullo exploto quemando casi todas las plumas que lo recubrían en el
proceso, y liberando junto con la enorme explosión, una infinidad de luces rojas
que rápidamente se elevaron muy por encima de la superficie del mar,
desapareciendo en la infinidad del cielo nocturno, un espectáculo atemorizante
e increíble que solo las 183 personas que habían viajado hasta este ese punto
tan peligroso del triangulo de las bermudas pudieron ver. Todos ellos llevaban
unas extrañas gabardinas blancas de cuello alto, con una enorme cruz roja en la
espalda, unas cruces negras mas pequeñas en cada hombro y además, de lado
izquierdo de su pecho un emblema que tenia dibujado un caballero que llevaba
una alas detrás y un enorme escudo al
frente decorado con una cruz roja, rodeado en circulo por unas letras que
decían "Non nobis, Domine, Non
Nobis. Sed Nomini Tuo Da Gloriam"; pero a pesar
de lo extraño que había sido ese espectáculo uno de los presentes simplemente
observaba tranquilamente desde la proa como si fuera algo sin importancia y mas
bien prestándole atención a un viejo reloj de mano del siglo XIX que brillaba
en su mano y que se había atascado en la 12 horas justo a la medianoche, ese
hombre llevaba en su cara un cubre bocas y unos lentes que junto a su pelo negro,
le daban un aire de misterio y solo dejaba de observar ese reloj debes en
cuando para contar las luces mas grandes que salían del mar hacia el cielo,
hasta que un sujeto mas alto que el con una extraña barba y bigote al estilo de
Guy Fawkes acompañado de un sombrero como el que supuestamente usaba Robin Hood
pero de color blanco, se le acerco y hablándole en ingles le pregunto:
-Amigo, ¿Esta es la manera como esperabas pasar el año nuevo?
-Créeme existen peores formas de pasar el año nuevo que esta- dijo en
un tono algo burlón- además ¿Quién diría que la oscuridad podría producir una
luz tan hermosa?
-De hecho, es un hermoso brillo rojo ahora que lo mencionas
Dicho esto, el sujeto de cabello negro se volteo y dirigió su atención
hacia un par de niños que se encontraban sobre la parte más alta del techo del
yate tomando notas de la dirección que llevaban todas y cada una de las luces
que salían del mar, pero esta vez hablando en Italiano y demostrando con eso
que tenia una gran facilidad para hablar varios idiomas les pregunto
-Rómulo, Remo ¿tienen la trayectoria de cada alma?
-Si Gran maestre -dijo uno de los chicos que en realidad no parecía mayor
de 17 años y que con su cabello rubio y una apariencia delicada, casi parecía
una niña- yo diría que con esto bastara
para darnos una idea de los patrones de dispersión de todo esas almas en el
planeta ¿verdad hermano? – continuo hablando muy alegremente
-Solo cállate y trabaja- le respondió con una voz algo rasposa la otra
persona que estaba a lado de el, el cual tenia una complexión casi idéntica a
la suya pero con la diferencia de que su cabeza se encontraba cubierta de
vendas y solo se le alcanzaba a observar parte de su cabello por sobre las vendas
y unos ojos sin parpados por entre los espacios de las mismas.
Una vez que ya casi todas luces se habían alejado de ese lugar el Gran
Maestre, se dirijo hacia la entrada del interior del yate donde se encontraban
casi todos los demás tripulantes del yate quienes en su mayoría no salían de su
asombro por lo que acababan de ver y escuchar, y les dijo esta vez en ingles
-Bien damas y caballeros, espero que esto haya disipado sus dudas, a partir
de este momento el verdadero trabajo ha comenzado.
PROXIMA PARTE
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